Quien mas… quien menos, los que somos unos apasionados de la práctica del MTB, la gran mayoría tenemos el «handicap» de que nuestra afición no perjudique a nuestra pareja.
Claro está que dentro del ámbito del sentido común y del respeto todo es posible… y que cada pareja es diferente… nunca está de más tener en cuenta estos excelentes consejos que nos da Todomountainbike … 😉
- Madrugar más y llegar antes. Si queremos tener a nuestra pareja más feliz, lo mejor que podemos hacer es madrugar un poco más y salir a rodar más temprano de lo habitual. De esta manera, llegaremos a casa antes y podremos satisfacer las posibles necesidades de nuestra media naranja; salir a pasear, hacer la compra o simplemente, ayudar en lo que haga falta. No es necesario dedicar una mañana o tarde entera a nuestra afición si podemos evitarlo saliendo un poco más temprano de lo habitual.
- Ni caso de los amigos solteros. Sin duda, entre nuestros compañeros de ruta siempre encontraremos personas solteras que no tienen ningún problema con respecto a la hora de llegada, o ninguna obligación conyugal. No debemos hacer caso de sus frecuentes bromas ni caer en la tentación de hacer lo mismo que ellos, ya que nuestra pareja no se merece tener un marido o una esposa que mentalmente cree que sigue soltero. Nuestros compañeros de ruta terminarán asimilando que nuestra pareja es muy importante para nosotros, y probablemente nos envidiarán por ello (aunque no lo parezca).
- Organizar un calendario con nuestra pareja. Realizar un calendario con nuestra pareja y organizar las salidas en bicicleta de forma conjunta puede resultar muy beneficioso para ambas partes. De este modo nos aseguramos de que nuestra pareja conoce los días y horarios de nuestras salidas en bicicleta y los acepta de forma consciente, con lo que ya tenemos media batalla ganada. Una agenda organizada de forma conjunta es mucho más fácil de seguir y de ser aceptada por nuestro marido o esposa.
- En casa, hay que estar en casa. El tiempo que pasamos en casa con nuestra familia o pareja debe ser de calidad. De nada sirve salir a rodar con la bicicleta si cuando llegamos a casa nos dedicamos a tumbarnos en la cama o el sofá y comportarnos como un maniquí sin vida. Hay que estar en casa de la misma forma que sobre la bicicleta, con ánimo, muchas ganas y preparado para hacer cualquier cosa. Cuando el tiempo que pasamos en casa con nuestra pareja es de calidad, el tiempo que pasamos fuera de casa es mucho más fácil de justificar.
- La pareja siempre bien informada. Siempre deberíamos mantener a nuestra pareja o familia informada de nuestras salidas en bicicleta. Una sencilla llamada de teléfono avisando de que hemos llegado a nuestro punto de destino o de que vamos a llegar a casa a tal hora siempre resulta muy recomendable. Además, si aprovechamos la llamada telefónica para interesarnos por lo que está haciendo nuestra pareja en ese momento, tenemos el cielo ganado.
- Cuando todo falla, aplicar el soborno. En ocasiones, aunque sigamos estos consejos e intentemos mantener los horarios acordados con nuestra pareja, resulta imposible cumplir nuestros propósitos. Lo ideal para esos días en los que vamos a llegar con un par de horas de retraso o en los que nuestra media naranja está especialmente sensible, es aprovecharnos de un pequeño soborno. Esa colonia que tanto le gusta, sus flores preferidas, una cena en algún restaurante, un libro de su escritor preferido o el último disco de música de su cantante favorito pueden convertir un día de tormenta en un bonito día primaveral.